Encrucijada de las postulaciones Acreditación: Mientras no haya otra norma para evaluar la calidad de las casas de estudio, Julio Sepúlveda, magíster en Educación y orientador en la USACH, aconseja: "Los beneficios que entrega el Estado (becas, créditos) están relacionados con este requisito. Ahora bien, yo no recomendaría elegir una universidad que tenga menos de 5 años de acreditación. Además, la carrera que se elige también debe estar acreditada". Calidad de los profes: "Además de contar con un buen porcentaje de docentes con postgrados, importa la cantidad de horas que estos pasen dando clases o investigando allí. Y sería óptimo además que tengan presencia en el mercado laboral", dice Miryam Granada, directora de asesoría pedagógica y vocacional del Preuniversitario Cepech. La información sobre la planta académica se encuentra en los sitios de las universidades. Infraestructura: Laboratorios, centros de investigación o de práctica, y bibliotecas, son otros factores de relevancia. "Claramente hay carreras que necesitan un nivel de infraestructura especial, como en el área de la salud, donde necesitas sí o sí acceso a hospitales. Pero hay otras carreras como las humanistas que son más de cátedra que de práctica", dice Miryam Granada. Ránkings de prestigio: Julio Sepúlveda recomienda mirar los ránkings publicados por organizaciones extranjeras. "Las mejores universidades de Chile aparecen en los rankings de la Shanghai Jiao Tong University, The QS World University, la clasificación webométrica del CSIC, el Ranking Iberoamericano SIR 2012 o el de América Economía". Valores: "Es muy importante evaluar los principios valóricos de la universidad. Si no estoy ni ahí con la religión, me va a ser difícil entrar a una universidad católica; tampoco es imposible estar ahí, ellos no harán diferencias conmigo, pero puede ser que me sienta incómodo con cursos obligatorios de religión. Lo mismo pasa con las tendencias políticas de las universidades", aconseja Miryam Granada.

Los errores al elegir una "U" Cerquita de la casa : "Muchos eligen una institución que les quede cerca de la casa. Otros ni siquiera quieren bajar más allá de Plaza Italia", comenta Miryam Granada. Promesas y rebajas : "Es un error dejarse llevar por la publicidad de algunas instituciones. Hay casos de buenos alumnos que estudian gratis, y a esa universidad le sirve para jactarse de que tiene un alumno con puntaje de excelencia. Pero quizás no es una buena universidad", opina Julio Sepúlveda. Por la pura fachada : "A veces eligen una universidad porque tiene edificios enormes, con áreas verdes, pero que académicamente es mediocre", añade Granada.