La búsqueda de soluciones naturales para problemas dermatológicos comunes ha dado un salto tecnológico significativo gracias a un nuevo proyecto de investigación liderado por el académico René Carmona, de la Facultad de Ciencias Forestales y de la Conservación de la Naturaleza de la Universidad de Chile. La iniciativa se centra en el desarrollo de un producto de vanguardia que combina la riqueza natural del sur del país con la precisión de la nanotecnología.
El corazón de este proyecto reside en la utilización de un Aceite Esencial, un Producto Forestal No Maderero (PFNM), extraído del Ciprés de las Guaitecas (Pilgerodendron uviferum), una conífera emblemática y nativa de la Región de Aysén. Esta materia prima no es un insumo genérico, sino que es obtenida directamente por productores locales de zonas extremas como Cochrane, La Junta y Melinka
El objetivo central de la investigación es doble: por un lado, dar valor agregado a los recursos forestales nativos, como el Ciprés de las Guaitecas y, por otro, ofrecer una alternativa terapéutica eficaz para el tratamiento del acné. Esta condición, que afecta a gran parte de la población, ha sido tratada históricamente con productos sintéticos que muchas veces conllevan efectos secundarios, situación que este desarrollo busca mitigar mediante una opción de origen natural.
La gran innovación que propone el profesor Carmona radica en la metodología de formulación. No se trata simplemente de aplicar un aceite sobre la piel, sino de someterlo a un proceso de formación de nanopartículas. Esta técnica avanzada permite encapsular el aceite, lo que aumenta significativamente su eficiencia y estabilidad, logrando una penetración y acción mucho más efectiva que las formulaciones tradicionales.
Para alcanzar este hito, el equipo de investigación se ha planteado objetivos rigurosos. En una primera etapa, se enfocarán en obtener y evaluar científicamente la actividad antibacteriana del aceite suministrado por los productores de la Patagonia. Es fundamental certificar que la materia prima base posee las propiedades biológicas necesarias para combatir las bacterias causantes del acné.
La metodología del proyecto contempla un desafío técnico mayor: el escalamiento productivo. Basándose en una fórmula desarrollada exitosamente a escala de laboratorio en un proyecto previo de la Fundación para la Innovación Agraria (FIA), el equipo ahora trabajará en replicar la fabricación del prototipo a una escala mayor, aumentando la producción de 1 a 10.
Durante este proceso de escalamiento, se estudiarán las variables críticas de fabricación para asegurar la estandarización del producto. La meta es obtener un prototipo de hidrogel tópico de alta calidad que sea técnicamente transferible, cerrando la brecha entre la investigación académica y la posibilidad real de comercialización en el mercado farmacéutico o cosmético.
Una vez estabilizado y escalado el prototipo, el proyecto entrará en su fase más decisiva: la validación clínica. Se realizarán pruebas controladas en personas que padecen actualmente el problema de acné, con el fin de demostrar empíricamente las propiedades beneficiosas del gel y su eficacia en un entorno real, más allá de las pruebas de laboratorio.
La importancia de esta iniciativa es transversal. No solo representa un avance en la biotecnología forestal al crear un producto de alto valor agregado, sino que también promete dinamizar la economía local de Aysén, transformando una materia prima regional en un insumo clave para una solución dermatológica de alta tecnología.
Con este proyecto, la Facultad de Ciencias Forestales reafirma su compromiso con la innovación y la transferencia tecnológica. El desarrollo de este gel nanoencapsulado tiene un gran potencial de mercado, posicionándose como un ejemplo de cómo la ciencia chilena puede transformar recursos naturales en soluciones sofisticadas para la salud y el bienestar humano.
